viernes, 8 de mayo de 2009

Ángeles y demonios… simplemente Clooney.

Normalmente tras mis noches de desenfreno volvía a casa, la última parte del trayecto, en bus y allí fue donde me encontré con el doble perfecto, incluso superior, de un actor que por aquella época me traía de cabeza, George Clooney (en estos momentos su sucesor es Huhg Jackman)
La primera vez que me tope con él yo llevaba unas copas de más y recuerdo hacerle una gracia en referencia a su parecido físico (con ese aspecto podría dedicarse a cualquier cosa… no le pegaba nada ser un simple conductor de autobús) jamás le había visto… aunque solía coger esa línea de bus.
Durante esa semana no me lo pude quitar de la cabeza, incluso como iba algo bebido pensé que lo había magnificado, cuando volví a verlo me terminé de pillar, era increíble y comenzó mi juego.
Un autobús a eso de las 06:30 de la mañana (noche de viernes a sábado) no suele estar muy petado de gente pero había la suficiente para no poder seducir a mi nuevo objetivo como lo hubiese echo en otro lugar, llamémosle más privado, aún así me lo fui camelando con miradas intensas y roces fugaces (me das el billete… tu mano toca la mía…) se notaba una tensión sexual entre ambos tremenda, incluso llegue a tener alguna que otra erección imaginando lo que íbamos a hacer, tarde o temprano acabaría sucediendo…
Un mes después cierto viernes me ligue a un tipo llamado Nacho, atlético, velludo, guapote y muy guarro (como a mi me gustaban)
Por lo tanto me fui con él a su casa y retomé, experimenté y me reafirmé en mis prácticas seudo-masoquistas… me lo folle al 100% varias veces mientras le trataba como a un puto perro, le practique el anal fisting, lluvia dorada y demás depravaciones sexuales hasta que terminamos dormidos, agotados y complacidos…
Al día siguiente Nachete me llevo a casa y volvimos a quedar esa noche repitiendo actos amatorios y mi conductor de autobús pasó a un segundo plano (realmente me acordé de él aunque decidí pasar un poco del tema hasta la siguiente semana)
Volví a quedar con mi nueva conquista y me planté en dicho bus con él (tenía pensado hacer algo si era posible y solo de imaginarlo se me ponía tan tiesa que me hacía daño)
La cara de mi Clooney se trasformó en auténtica pasión cuando me vio aparecer y de desconcierto cuando se dio cuenta que iba acompañado.
A mitad de camino tan solo quedaban unas siete personas y quitando un chaval que iba un par de asientos delante de nosotros los demás estaban muy al principio… empezó el show…
Le ordené a Nacho que me la comiera (mi increíble conductor había estado controlando cada uno de nuestros actos a través del retrovisor) y aquello fue la hostia… en pleno acto le hice parar… coloque mi polla en su sitio y fui hacía el conductor con la intención de comprobar algo…
La entrepierna de Clooney palpitaba, sus ojos ardían en deseo, sus labios eran como una fruta prohibida que invitaban al pecado, me lo hubiese comido allí mismo pero no podía ser, un par de hembras suspiraban por el macho que nos llevaba de vuelta a casa además de un señor mayor.
Me acerqué a él y le susurré al oído… “estoy deseando estar contigo… el próximo viernes te estaré esperando en la parada donde habitualmente me bajo… si quieres algo de mi ya sabes que hacer”
Como me gustaba Dios y el momento era tan morboso…

Me baje algunas paradas antes para ir con Nacho a la Dehesa y terminar de satisfacernos mutuamente, la temperatura no acompañaba demasiado pero mi calentón lo compensaba y de que manera.
Bajo un gran árbol, sobre un frío banco de madera corroída me follé a Nacho por última vez, en mi mente, mientras se la metía, solo tenía pensamientos para el que se iba a convertir en mi nuevo compañero de juegos, simplemente Clooney.

No hay comentarios: